Publican reglamento para uso medicinal de la marihuana
El documento tiene por objeto la regulación, control, fomento y vigilancia sanitaria de materia prima, derivados farmacológicos y medicamentos de la cannabis
A un año y cinco meses de que la Suprema Corte se lo ordenara, la Secretaría de Salud publicó el reglamento sobre el uso medicinal de la cannabis y sus derivados farmacéuticos.
El documento tiene por objeto la regulación, control, fomento y vigilancia sanitaria de materia prima, derivados farmacológicos y medicamentos de la cannabis, con fines de producción, investigación, fabricación y médicos.
El reglamento, publicado hoy en el Diario Oficial de la Federación, establece que los interesados en realizar las investigaciones sobre un uso medicinal de la marihuana deberán obtener, de la Cofepris, la autorización del Protocolo de Investigación.
Los permisos de siembra de cannabis para fines de investigación y fabricación de productos terapéuticos y medicinales deberán tramitarse ante el Senasica.
Para la prescripción de medicamentos de cannabis, los profesionales de la salud deberán solicitar una autorización ante la Cofepris y de esa forma obtendrán las claves en un código de barras. Además, deben acreditarse como profesionales en alguna de las ramas que indica el artículo 240 de la Ley General de Salud.
Para recetar este tipo de productos, se hará mediante recetarios especiales que deberán contener diversos datos, entre estos el folio y clave de expresada en código de barras.
También se establecen los requisitos para obtener permisos de importación de materia prima, así como de medicamentos de cannabis y sus derivados farmacológicos.
El reglamento consta en total de 80 artículos y entrará en vigor mañana.
Dicho documento fue elaborado, luego que la Suprema Corte de Justicia de la Nación ordenara el 14 de agosto de 2019 a la Secretaría de Salud reglamentar el uso medicinal de la marihuana.
Esta determinación se tomó luego de otorgar un amparo a una persona que requería un medicamento derivado de esta planta para tratar su salud pero no podía acceder al mismo, pues aunque ya se permitía el uso farmacéutico de la cannabis, no existía reglamentación al respecto.